martes, 16 de febrero de 2010

Los espíritus y las Fuerzas de la Naturaleza - PROLOGO - en you tube -


LOS ESPÍRITUS Y LAS FUERZAS DE
LA NATURALEZA
Nature Spirits and Nature Forces
(1937)

Max Heindel

INDICE

· Capitulo I - LOS ÉTERES Y LAS LEYES DE LA NATURALEZA,

· Capitulo II - LA ACTIVIDAD EN LOS MUNDOS CELESTIALES Y LAS FUERZAS DE LA NATURALEZA,

· Capitulo III - LA MISIÓN DEL CRISTO Y EL FESTIVAL DE LAS HADAS

· Capitulo IV - LAS FUERZAS DE LOS DISTINTOS PERIODOS, 

· Capitulo V - EL ESPÍRITU DE LA TIERRA, 

· Capitulo VI - DOS PREGUNTAS Y SUS RESPUESTAS, 

· Capitulo VII - LA CONSTITUCIÓN DE LA TIERRA Y LAS ERUPCIONES VOLCÁNICAS                                                                                          
                                                                       PROLOGO

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Este volumen contiene los escritos místicos de Max Heindel sobre el poco entendido tema de los Espíritus de la Naturaleza y las Fuerzas Naturales. Es, en realidad, una correlación de sus muchas obras, que han sido compiladas en un volumen por uno de los estudiantes del autor. Se reconoce generalmente a Max Heindel como el más adelantado de los Místicos del Occidente. En sus numerosas obras ha dado al mundo verdaderas minas de conocimientos acerca de los espíritus de la Naturaleza, esos pequeños seres con los cuales tuvo tantas y tan interesantes experiencias. El que esto escribe ha oído muchas historias, que desgraciadamente no fueron escritas, de sus experiencias con estos espíritus, de su manera de vivir y de su apariencia. Muchas veces había dicho que alguna vez pensaba escribir un libro sobre estos espíritus de la Naturaleza, pero el arduo trabajo que tenía entre manos para abrir el camino, impidió que se plasmara esta obra tan necesaria. Sin embargo, de vez en cuando fue dando detalles y datos en sus diversos escritos, los cuales han sido ahora recopilados, de manera que no sea posible darlos al mundo en un volumen condensado. En los 54 años que ocupó su cuerpo físico, dio al mundo numerosas obras del mayor valor. El libro maravilloso “Concepto Rosacruz del Cosmos” ha sido ya traducido a muchos idiomas y ha alcanzado ya su décimo quinta edición. Este no es mas que uno entre numerosos libros que legó al mundo para que adquiera conocimiento y disfrutara de el. Sus libros sobre Astrología son los más reputados y comprensibles que hayan existido jamás. Y su seducción principal es su manera clara y sencilla de impartir sus conocimientos a los demás.

AUGUSTA FOSS HEINDEL
15 de Abril de 1937


del libro "Los Espíritus y las Fuerzas de la Naturaleza", de Max Heindel

Los éteres y las Leyes de la Naturaleza - en you tube -


CAPITULO I
LOS ÉTERES Y LAS LEYES DE LA NATURALEZA

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Hablar del éter como medio de transmitir fuerzas, no dice nada a la mentalidad corriente, porque la fuerza es invisible. Pero para el investigador oculto, las fuerzas no son puramente nombres tales como vapor, electricidad, etc., sino que descubre que son seres inteligentes, de diversos grados, tanto sub como suprahumanos. Lo que llamamos leyes de la Naturaleza son Grandes Inteligencias que guían y dirigen a seres mas elementales, de acuerdo con ciertas reglas, determinadas para acelerar su evolución.
En la Edad Media, cuando muchas personas estaban todavía dotadas de los remanentes de la clarividencia negativa, hablaban de Gnomos, de duendecillos, hadas, etc., que vagaban por las montañas y las selvas. Estos eran los espíritus de la tierra. También se mencionaban las Ondinas y las Ninfas o espíritus del agua, que habitaban en los ríos y las corrientes de agua, los Silfos, que moraban en las neblinas y brumas que estaban sobre los pozos y las ciénagas, como espíritus del aire, pero no se hablaba mucho de las Salamandra, como estas son los espíritus del fuego, y por eso no son tan fácilmente descubiertos ni accesibles para la mayoría de las personas.
Actualmente se considera a las antiguas leyendas, como supersticiones, pero la verdad es que, cualquiera que esté dotado con la visión clarividente, puede percibir a los pequeños gnomos fabricando la verde clorofila de las hojas de las plantas y dando a sus flores esa multitud de matices delicados y preciosos que constituyen la delicia de nuestros ojos.
Los hombres de ciencia han tratado unas y otras veces de ofrecer una explicación adecuada de los fenómenos de los vientos y de las tormentas, pero han fracasado rotundamente, ni obtendrán jamás éxito mientras traten de ofrecer simples soluciones mecánicas a lo que realmente es una manifestación de la vida. Si pudieran ver las legiones de Silfos aleteando de un lado para otro, sabrían quienes causan la varialidad de los vientos. Y si pudieran observar una tormenta en el mar desde el punto de vista etérico, verían que lo que se llama la “guerra de los elementos” no es una frase vacía, porque el tumulto del mar es entonces realmente el campo de batalla de los Silfos y las Ondinas y los rugidos de la tempestad no son mas que los gritos de guerra de los espíritus en el aire.
Las Salamandras se encuentran por todas partes y no se puede encender el fuego sin su concurso, pero sobre todo se encuentran en actividad bajo tierra. Son ellas las que causan
las explosiones y las erupciones volcánicas.
Las clases de seres que hemos mencionado son todavía sub-humanos, aunque todos ellos,
en algún tiempo, alcanzarán un estado evolutivo correspondiente al humano, aunque en diferentes circunstancias de las que ahora nos rodean. Pero actualmente, las maravillosas inteligencias de las que hablamos como “Leyes de la Naturaleza”, son las que dirigen a las legiones de dichas entidades menos evolucionadas.
Para mejor comprender lo que son estos diversos seres y sus relaciones con nosotros, podemos considerar la siguiente ilustración: supongamos que un mecánico está construyendo una maquina y mientras tanto un perro lo está observando. El perro ve al hombre trabajando, así como los distintos instrumentos que emplea para dar forma a sus materiales. Y ve también como del hierro, acero, bronce y otros metales en bruto , va surgiendo lentamente la forma de la máquina. El perro es un ser perteneciente a una evolución inferior, y no comprende el propósito del mecánico, pero si ve al obrero, su trabajo y el resultado del mismo que se manifiesta como una máquina.
Si además suponemos que el perro sólo fuera capaz de ver los materiales que lentamente  han cambiando de forma, ajustándose entre si y convirtiéndose finalmente en una máquina,
pero que no pudiera ver al trabajador y el trabajo que hace, entonces el perro se encontraría en la misma relación con respecto al mecánico, como nosotros nos encontramos con respecto a esas grandes Inteligencias a quienes llamamos Leyes de la Naturaleza, porque somos capaces de contemplar las manifestaciones de su trabajo como fuerzas que mueven a la materia en distintas formas, pero siempre bajo condiciones inmutables.
En el éter podemos también observar a los ángeles, cuyo cuerpo mas denso está formado por ese material, en vez de estarlo, como nuestro cuerpo físico, de gases, líquidos y sólidos.
Esos LOS ESPÍRITUS Y LAS FUERZAS DE LA NATURALEZA seres están un poco mas adelante que la etapa humana, así como nosotros nos encontramos en una etapa superior a la de los animales, evolutivamente hablando. Nunca hemos sido animales iguales a los de la fauna actual, sin embargo, en una etapa anterior del desenvolvimiento de nuestro planeta, hemos tenido una constitución similar a la del animal.
En esa época los ángeles eran humanos, aunque nunca poseyeron un cuerpo denso igual al nuestro, ni llegaron a vivir en ninguna materia mas densa que el éter. En un estado futuro la Tierra volverá nuevamente a un estado etérico y entonces el ser humano será como los ángeles. Por eso la Biblia nos dice que el hombre fue hecho un poco menor que los ángeles. (Hebreos, 2, 17.)
Y así como el éter es el canal o conductor de las fuerzas vitales creadoras y como los ángeles son los mas hábiles y experto en manipular el éter, podemos comprender fácilmente que están especialmente en condiciones de ser los guardianes de las fuerzas de propagación en las plantas, los animales y el ser humano. En la Biblia siempre los encontramos en relación con esto. Dos ángeles vinieron a Abrahán a anunciarle el nacimiento de Isaac.
Ellos prometían hijos a los hombres que obedecían a Dios. Mas tarde esos mismos ángeles
destruyeron a Sodoma por el abuso de las fuerzas creadoras. Ángeles fueron los que anunciaron a los padres de Samuel y de Sansón el nacimiento de estos gigantes de la inteligencia y del músculo. Y a Isabel vino el ángel (no el Arcángel) Gabriel y le anuncio el nacimiento de Juan., apareciéndosele mas tarde a María con el mensaje de que Ella había
sido elegida para concebir a Jesús.

del libro "Los espíritus y las Fuerzas de la Naturaleza", de Max Heindel

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La actividad en los Mundos Celestiales y las Fuerzas de la Naturaleza - en you tube -


CAPITULO II

LA ACTIVIDAD EN LOS MUNDOS CELESTIALES Y LAS FUERZAS DE
LA NATURALEZA

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Estamos acostumbrados a hablar de Evolución, pero ¿acaso nos detenemos a analizar lo que constituye le Evolución misma y por qué esta no se detiene y paraliza? Si lo hacemos, nos veremos obligados a reconocer que hay ciertas fuerzas tras todo lo visible que son las causantes de la alteración de la flora y de la fauna, de los cambios climáticos y topográficos que están produciéndose constantemente, y entonces es muy natural que nos preguntemos cuales o quienes son las fuerzas o agentes en evolución.
Por supuesto, sabemos muy bien que los científicos dan ciertas explicaciones mecánicas de todo ello. Son merecedores del mayor respeto y ha sido mucho lo realizado por ellos si tenemos en cuenta que la ciencia está en su infancia y sólo tiene a su disposición los cincosentidos y los instrumentos que ha inventado para ayudarse. Sus deducciones son maravillosamente verdaderas, lo cual no quiere decir que no existan ciertas causas básicas que todavía no puede percibir, pero que permiten obtener una plena comprensión del asunto, muchísimo mejor que la que suministra la pura explicación mecánica. Una ilustración aclarará este punto.
Dos hombres están conversando, cuando, súbitamente, uno de ellos golpea y hace caer al otro. Ahí tenemos una ocurrencia, un hecho, y podemos explicarlo mecánicamente diciendo: “He visto a un hombre contraer los músculos de su brazo, dirigiendo un golpe contra el otro, haciéndolo caer ” Esta versión es verdadera hasta donde alcanza , pero el ocultista vería también un pensamiento de ira, que fue el que inspiró el golpe, y podría dar una versión mas completa al decir que el hombre fue derribado por un pensamiento , puesto que el puño cerrado no era mas que el instrumento irresponsable de la agresión. Sino hubiera existido la fuerza impulsiva del pensamiento de ira, la mano habría permanecido inerte y el golpe no se habría producido.
La Ciencia Oculta refiere todas las causas a la Región del Pensamiento Concreto y nos habla de cómo dichas causas son generadas allí por los espíritus humanos y suprahumanos.
Y si recordamos que los arquetipos creadores de todo cuanto vemos en el Mundo Sensible, se encuentran en el Mundo del Pensamiento, que es el Reino del Sonido, nos encontraremos en situación de comprender que las fuerzas arquetípicas están operando constantemente a través de estos arquetipos, los cuales emiten cierto sonido, o bien, cuando se agrupa un número de ellos para crear una especie de forma vegetal, animal o humana, los diferentes sonidos se unen en un gran acorde. El sonido simple o acorde, según sea el caso, es la clave de la forma así creada, y mientras resuena, sobre vive la forma de dicha especie; y cuando cesa de sonar, esa forma o especie muere.

Una masa de sonidos no es música, de la misma manera que un montón de palabras mezcladas al azar no forma una frase. Pero el sonido rítmico ordenado es el constructor de todo lo que es, como lo dice San Juan en los primeros versículos de su Evangelio: “En el Principio era el Verbo... y sin él nada fue hecho”, así como también que “el Verbo se hizo carne”
Vemos, pues, así que el sonido es el creador y el sustentador de todas las formas, y en el Segundo Cielo el Ego se convierte en uno con las fuerzas de la Naturaleza. Con ellas trabaja sobre los arquetipos de la tierra, del mar, de la flora y de la fauna, para producir los cambios que gradualmente alterarán la apariencia y las condiciones de la Tierra, suministrando así un nuevo medio circundante, hecho por sí mismo, en el cual pueda realizar nuevas experiencias.
En esta tarea es dirigido por los grandes constructores pertenecientes a las Jerarquías Creadoras, llamadas Ángeles, Arcángeles y demás nombres, todos los cuales son los ministros de Dios. Ellos lo instruyen conscientemente en el arte divino de la creación, tanto en lo respecta al mundo como a los objetos que existen en él. Y le enseñan a construir una forma para sí mismo , dándole como auxiliares a los Espíritus de la Naturaleza, realizando de esta manera el ser humano LOS ESPÍRITUS Y LAS FUERZAS DE LA NATURALEZA un aprendizaje para convertirse en un Creador cada vez que va al Segundo Cielo. Allí es donde forma el arquetipo de la forma que mas tarde exteriorizará o manifestará al nacer.
Existen cuatro éteres: químico, vital, luminoso y reflector. Hay fuerzas que operan sobre el polo positivo o negativo de los diferentes éteres. Los Egos que están en el Mundo Celestial son parte de esas fuerzas y de ahí resulta que justamente aquellos a quienes llamamos muertos son los que forman nuestros cuerpos y nos ayudan a vivir. Si alguno comete un error en su trabajo en el Mundo Celestial, pronto se dará cuenta de él al tener que emplear un cuerpo defectuoso en la Tierra, aprendiendo así a corregir el error en la próxima vez que forme un nuevo arquetipo.
Todos los habitantes del Mundo Celestial trabajan sobre los modelos de la Tierra, los cuales se encuentran en la Región del Pensamiento Concreto. Alteran las características físicas de la Tierra y van produciendo los cambios graduales que varían en apariencia, de manera que cada vez que retornan a la vida física, se encuentran con un nuevo medio circundante en el cual pueden hacerse nuevas experiencias. El Clima, la Flora y la Fauna son así transformados por el hombre bajo la dirección de los Seres Superiores.
El mundo resulta así lo que nosotros mismos, individual o colectivamente, lo hemos hecho.
El ocultista científico ve en todo cuanto ocurre una causa de naturaleza espiritual manifestándose, sin omitir la prevalencia y la frecuencia alarmante y creciente de las perturbaciones sísmicas, que puede atribuir al pensamiento materialista de la Ciencia Moderna.
Es verdad que causas puramente físicas pueden provocar esas perturbaciones; pero ¿constituyen acaso la última palabra sobre el asunto? ¿Podemos siempre obtener una explicación plena y completa limitándonos a registrar lo que aparece en la superficie ?
¡Claro que no! El ocultista dice que si no fuera por el materialismo, no se presentarían esas perturbaciones sísmicas.
El trabajo del hombre en el Mundo Celestial no se reduce meramente a la transformación de la superficie de la Tierra que deberá convertirse en escenario de sus futuras luchas para subyugar el Mundo Físico. También está trabajando para aprender a modelar cuerpos que le permitan mejores medios de expresión. El destino del hombre es el de convertirse en una Inteligencia Creadora y actualmente está haciendo el aprendizaje. Durante su vida celestial
aprende a construir toda clase de cuerpos, incluso el cuerpo humano.
Vemos, pues, que así es como el hombre aprende a construir sus vehículos en el Mundo Celestial, para poderlos luego usar en el Mundo Físico. La Naturaleza provee todas las fases de experiencia posible de una manera maravillosa y con una sabiduría tan consumada que conforme vamos ahondando mas y mas profundamente en sus secretos, nos quedamos mas y mas impresionados con nuestra propia insignificancia, lo que da nacimiento a una reverencia cada vez mayor hacia Dios, cuyo símbolo visible es la Naturaleza.

del libro "Los Espíritus y las Fuerzas de la Naturaleza", 
de Max Heindel


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La Misión del Cristo y el Festival de las Hadas - en you tube -


CAPITULO III

LA MISIÓN DEL CRISTO Y EL FESTIVAL DE LAS HADAS
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Cada vez que nos enfrentamos con uno de los misterios de la Naturaleza que no podemos explicar, nos limitamos simplemente a agregar un nombre nuevo a nuestro vocabulario, que utilizamos en nuestras discusiones eruditas para ocultar nuestra supina ignorancia sobre esa materia.
Así sucede con la palabra ampere que usamos para medir el volumen de la corriente eléctrica; el voltio, con la que indicamos la fuerza de la corriente, y el ohm, que empleamos para indicar la resistencia que un determinado conductor ofrece al paso de la corriente. Y de esta manera, con mucho estudio de palabras y cifras, los maestros de la ciencia de la electricidad tratan de persuadirse a sí mismo y a los demás de que ya han aprendido los misterios de la fuerza evasiva que desempeña un papel tan importante en el trabajo del mundo. Pero una vez dicho todo, cuando se encuentran en un estado de ánimo comunicativo y confidencial, confiesan que el más reputado científico en electricidad sabe acerca de ésta poco más que el niño que va a la escuela y que empieza a hacer experimentos con sus pilas y acumuladores.
Similarmente ocurre con las demás ciencias. El mejor anatomista no es capaz de distinguir el embrión humano del camino durante mucho tiempo, y mientras el fisiólogo habla en forma erudita acerca del metabolismo, no puede dejar de admitir que los experimentos de laboratorio en los cuales trata de imitar nuestros procesos digestivos, son completamente diferentes de las transmutaciones que se producen en el laboratorio químico del cuerpo con
los alimentos que ingerimos. No decimos esto para empequeñecer o desacreditar los maravillosos descubrimientos y realizaciones de la ciencia, sino meramente para destacar el hecho de que existen factores tras todas las manifestaciones de la Naturaleza Inteligencias de variados grados de conciencia, constructores y destructores, que realizan funciones importantes en la economía de la Naturaleza y hasta que se reconozcan y estudien esos agentes y su trabajo, nunca podremos tener una concepción adecuada de la forma en que operan las fuerzas de la Naturaleza y que llamamos calor, electricidad, gravedad acción química, etcétera. A los que han cultivado la clarividencia espiritual, es evidente que los que llamamos muertos emplean una parte de su tiempo en aprender a construir cuerpos bajo la dirección de ciertas jerarquías espirituales. Y ellas son los agentes de los procesos del metabolismo y del anabolismo; son los factores invisibles de la asimilación y resulta literalmente verdadero que nos sería imposible vivir salvo por la importante ayuda que nos prestan los que llamamos muertos.
En relación con las fuerzas de la Naturaleza hemos explicado como el calor del Sol provoca
la evaporación del agua de los ríos y océanos, haciéndola así ascender a la zonas mas frías del aire, donde se condensa formando las nubes, las que finalmente se encuentran tan saturadas por la humedad que vuelve a caer sobre la Tierra, en forma de lluvia, para rellenar ríos y océanos y repetir el proceso indefinidamente. Todo es perfectamente simple, un proceso o movimiento perpetuo y automático. Pero ¿es eso todo? ¿No existen en esa teoría un gran número de lagunas?. Sabemos que las hay, aunque no podemos apartarnos mucho del tema para discutirlas. Una cosa hace falta para poderlo explicar todo plenamente: la acción semi inteligente de los silfos, que elevan las diminutas partículas de agua vaporizada, preparadas por las ondinas, desde la superficie del mar y las llevan tan alto como pueden antes de que se produzca una condensación parcial y se formen las nubes.
Ellos conservan esas partículas de agua hasta que las ondinas los fuerzan a soltarlas.
Cuando hablamos de tormentas, se trata de batallas que tienen lugar en la superficie del mar y el aire, en las cuales intervienen algunas veces las salamandras, que son las que encienden la antorcha resplandeciente del hidrógeno y del oxígeno separados, enviando sus zigzags atronadores por la negrura de la inmensidad con sus truenos, cuyas vibraciones reverberan y aclaran la atmósfera, mientras que las ondinas arrojan triunfalmente las rescatadas gotitas de agua hacia la Tierra, para que puedan ser restituidas y unidas a su elemento propio.
Los pequeños gnomos son necesarios para construir las plantas y las flores. Su tarea consiste en teñirlas con los innumerables matices coloreados que hacen la delicia de nuestros ojos. LOS ESPÍRITUS Y LAS FUERZAS DE LA NATURALEZA Son ellos también los que cortan los cristales en todos los minerales y forman las gemas preciosas que brillan en resplandecientes diademas. Sin ellos no existiría el hierro ni el oro con que pagarlo. Se encuentran por todas partes y son mas trabajadores que las mismas abejas. A la abeja, sin embargo, se le reconoce su trabajo, pero a los pequeños espíritus de la Naturaleza, que desempeñan un papel tan importante en el trabajo del Mundo, nadie los reconoce excepto un pequeño número de esos a quienes llamamos soñadores.
En el Solsticio de Verano, las actividades físicas de la Naturaleza alcanzan su máximo o Cenit. Por eso es que esa noche, la Noche de San Juan es el gran festival de las hadas y espíritus de la Naturaleza, que han estado trabajando para construir el Universo Material, alimentando a los ganados, formando los granos y que aclaman con alegría y gratitud a la oleada de energía que constituye un instrumento para modelar las flores con su administrable variedad de formas y colores, de acuerdo con sus respectivos arquetipos, tiñéndolas con infinitos matices que constituyen a la vez la delicia y la desesperación del artista. Y en esta, la más grande de todas las noches de la Estación Estival, corren en alegres bandadas desde los pantanos y los bosques, desde las cañadas y los prados, al Festival de las Hadas. Realmente preparan y condimentan sus alimentos etéreos y después danzan en un éxtasis de alegría y contento; la alegría y el contento de haber hecho su trabajo y realizado su importante papel en la economía de la Naturaleza.
Es un axioma de la ciencia que la Naturaleza no tolera nada inútil. Los parásitos y los zánganos son una abominación; el órgano que se torna superfluo se atrofia y los mismo pasa con el miembro o el ojo que no se emplea mas. La Naturaleza tiene su trabajo que hacer y exige a todos los que quieran justificar su existencia y continuar formando parte de Ella, que trabajen. Esto se aplica a todos: desde la planta al planeta, al hombre, al animal y a las hadas y demás espíritus de la Naturaleza. Tienen su tarea que realizar; son entidades muy ocupadas y sus actividades constituyen las solución de muchísimos de los innumerables misterios de la Naturaleza, ya explicados.
Mas tarde, en el Solsticio de Invierno, nos encontramos en el otro polo del ciclo anual, en el que los días son cortos y las noches largas. Físicamente hablando, las Tinieblas envuelven al Hemisferio Norte, pero la oleada de Luz y Vida Espirituales que constituirán la base del crecimiento y progreso del mismo año, se encuentran ahora en su máxima potencia y tensión. En la Noche de Navidad, durante el Solsticio de Invierno, cuando el signo celestial de la Virgen Inmaculada se eleva en el horizonte oriental a Media Noche, nace el Sol del nuevo año para salvar a la humanidad del frío y del hambre que se producirían de faltar su luz. En ese tiempo el Espíritu de Cristo nace en la Tierra y comienza a ejercer su acción, fertilizando los millones de simientes que los espíritus de la Naturaleza construyen y riegan para que haya alimento físico. Pero “no solo de pan vive el hombre”. Por mas importante que sea el trabajo de dicho espíritus, se desvanece en la mayor insignificancia al compararlo con la misión del Cristo, que nos trae cada año el alimento espiritual necesario para hacernos adelantar en la senda del progreso, para que lleguemos ha alcanzar la perfección del amor con todo lo que ello implica.

1 En el Hemisferio Sur los lectores, donde en este capítulo se dice “Noche de San Juan”, deben leer “Noche de Navidad”, y donde se dice “Noche de Navidad ” léase “Noche de San Juan ” ( No. Del T.)

del libro "Los Espíritus y las Fuerzas de la Naturaleza", de Max Heindel

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Las Fuerzas de los distintos Períodos - en you tube -


CAPITULO IV
LAS FUERZAS DE LOS DISTINTOS PERIODOS

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Durante el Periodo Lunar, el contacto de la esfera caliente con el frío del Espacio género humedad y entonces comenzó la batalla de los elementos con toda su fuerza. La Esfera de Fuego trataba de evaporar la humedad y expulsarla hacia el exterior, creando un vacío dentro del cual pudiera mantener su integridad y arder imperturbablemente. Pero no hay ni puede haber vacío alguno en la Naturaleza y así la corriente de vapor que brotaba hacía el exterior se condensaba a cierta distancia de la Esfera Ardiente y era nuevamente impulsada hacía adentro por el frío del Espacio, para ser nuevamente evaporada y repelida hacía afuera en un ciclo incesante durante edades y edades como un volante o rehilete entre las distintas jerarquías de Espíritu que componen los varios Reinos de la Vida, representados en la Esfera Ígnea y en el Espacio Cósmico, que es una expresión del Espíritu Homogéneo Absoluto. Los Espíritus del Fuego están luchando activamente para lograr la expansión de la conciencia. Pero el Absoluto reposa, envuelto siempre en la invisible vestidura del Espacio Cósmico. En “El ” existen latentes todos los poderes y las posibilidades, y El trata de desanimar y reprimir toda tentativa de gastar los poderes latentes como energía dinámica requerida para la Evolución de nuestro Sistema Solar. El Agua es el agente que El emplea para apagar el fuego de los espíritus activos. La zona entre el Centro Ardiente de la Esfera separada de los Espíritus y el Punto en que su atmósfera individual choca contra el Espacio Cósmico, es el campo de batalla de los espíritus evolucionantes en diversos grados de desarrollo.
Los Ángeles actuales eran humanos en el Periodo Lunar y el Jefe de sus Iniciados era el Espíritu Santo ( Jehovah ) 1.
Y así como nuestra actual humanidad y otros Reinos de la Vida que se encuentran en la Tierra, son afectados diversamente por los elementos presente, de tal manera que unos prefieren el calor y otros el frío, unos prefieren la humedad y otros requieren la sequedad; así también, en el Periodo Lunar entre los Ángeles, unos tenían afinidad por el agua y otros la aborrecían y preferían el Fuego.
Desde el punto de vista cósmico observamos que el Templo de Salomón es el Sistema Solar y que Hiram Abiff, el Gran Maestre, es el Sol que pasa entorno de los doce signos del Zodiaco, representando el místico drama de la Leyenda Masónica. En el Equinoccio Vernal, el Sol abandona el signo acuoso de Piscis, que es también femenino y dócil, para entrar en el signo ígneo de Aries, beligerante, marcial y enérgico, el Carnero o el Cordero, donde el Sol se encuentra exaltado en su poder. El llena el Universo con su fuego creador, que absorben inmediatamente los innumerables billones de espíritus de la Naturaleza, los que forman con ese fuego el Templo del próximo año en bosques y pantanos. Las fuerzas de la fecundación aplicada a las innumerables simientes que duermen en la Tierra las hacen germinar y llenar la Tierra con lujurienta vegetación, mientras que otros grupos de espíritus de la Naturaleza dirigen la unión de los animales y de las aves a su cargo, para que se multipliquen y acrecienten suficientemente para mantener la fauna del planeta en cantidad normal.
La Conciencia Objetiva mediante la cual obtenemos el conocimiento del mundo externo depende de lo que percibimos a través de los sentidos. A esto lo llamamos real en contra-distinción con nuestros pensamientos e ideas, que llegan a nosotros a través de nuestra conciencia interna. Su realidad no es tan aparente para nosotros como un libro, una mesa u otro objeto visible o tangible que haya en el espacio. Los pensamientos e ideas
parecen nebulosos e irreales, lo que nos hacen hablar de “un mero pensamiento”, o una “simple idea ”.
1 Pronunciación aproximada: Yejová . (N. Del T. )
Las ideas y pensamientos de hoy tienen, sin embargo, toda una evolución ante ellas: están destinados a convertirse en cosas reales, claras y tangibles, como cualquiera de los objetos que percibimos en el Mundo Externo y que ahora podemos percibir mediante los sentidos físicos. Actualmente, cuando pensamos en una cosa o color que nos presenta la memoria a nuestra conciencia interna es algo muy apagado y penumbroso, en comparación con la cosa o color mismo en que pensamos. Pero ya en el Periodo de Júpiter se producirá un marcado cambio en ese respecto. Entonces volverán las imágenes soñadas del Periodo Lunar, pero esas imágenes estarán entonces sujetas a la voluntad del pensador y ya no serán simples reproducciones de los objetos externos. Entonces habrá una combinación de las imaginaciones del Periodo Lunar y de los pensamientos e ideas desarrollados conscientemente durante el Periodo Terrestre, esto es, existirá una consciencia imaginativa consciente de si misma.
Cuando un ser humano del Periodo de Júpiter diga “rojo” o pronuncie el nombre de un objeto se presentara inmediatamente ante su visión interna y también visible para su interlocutor, una reproducción exacta del matiz particular del rojo en que este pensando o del objeto cuyo nombre haya pronunciado. No podrá haber el menor mal entendido con respecto al verdadero significado de las palabras que se digan. Los pensamientos e ideas serán vivientes y visibles y, por lo tanto, desaparecerá la hipocresía y la adulación. Todas las personas se verán tal como son. Habrá naturalmente el hombre completamente bueno y el hombre completamente malo, y uno de los mas graves problemas de ese Periodo será justamente el de solucionar la manera de tratar a este último.
Los Maniqueos, una Orden mucho más espiritual que la de los mismos Rosacruces, están actualmente dedicados al estudio de ese problema. Una idea de su estado puede obtenerse anticipadamente del resumen de su leyenda. Todas las Ordenes Místicas tienen una leyenda simbólica de sus ideales y aspiraciones. En la leyenda de los Maniqueos se dice que existirán dos Reinos, el de los Elfos de la Luz y el de los Elfos de la Noche. Los últimos atacan a los primeros, son derrotados y de vencer castigados. Pero como los Elfos de la Luz son totalmente buenos, no pueden causar daños algunos a los Elfos Tenebrosos, sus enemigos, de manera que entonces tendrán que castigarlos con el Bien. Por lo tanto, una parte del Reino de los Elfos de la Luz se incorpora a los Elfos Tenebrosos, y de esta manera el Mal es vencido a su debido tiempo. El Odio que no se somete al odio, tiene que sucumbir ante el Amor.
Las imágenes internas del Periodo Lunar eran una forma de expresión del ambiente circundante exterior. Durante el Periodo de Júpiter, esas imágenes se expresarán desde lo interior: serán como el brote de la vida interna del ser humano. Entonces también poseerá la facultad adicional, que ya cultivará en la Tierra o Periodo Terrestre, de ver las cosas en el espacio, fuera de si mismo. Durante el Periodo Lunar no veía la cosa concreta misma, sino solamente sus cualidades anímicas, pero en el Periodo de Júpiter vera ambas cosas y tendrá así una percepción y una comprensión completa de su ambiente. En una etapa posterior de este mismo Periodo ésta facultad perceptiva será sobre pasada por otra más elevada. Su poder de formar concepciones mentales claras y precisas de los colores, objetos, sonidos, etc., le permitirá ponerse en contracto e influir seres suprasensibles de diversos órdenes, asegurándose así su obediencia y empleando sus fuerzas según su voluntad. Si embargo, no podrá emitir de si mismo las fuerzas necesarias para llevar a cabo sus designios, y tendrá que depender de la ayuda de estos seres suprafísicos, que entonces estarán a su servicio.
Al final del Periodo de Venus podrá usar su propia fuerza para dar vida a sus propias imágenes y exteriorizarlas objetivamente, como cosas en el espacio. Entonces poseerá una conciencia creadora, objetiva y consciente de sí.

del libro "Los Espíritus y las Fuerzas de la Naturaleza", de Max Heindel

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El Espíritu de la Tierra - en you tube -


CAPITULO V
EL ESPÍRITU DE LA TIERRA

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La mayoría de nosotros marchamos sobre la Tierra y vemos solo una masa muerta en apariencia, pero uno de los primeros hechos que se revelan a la conciencia del iniciado es la realidad viviente del Espíritu de la Tierra. Así como la superficie del cuerpo está muerta en comparación con los órganos internos, así también la envoltura exterior de la Tierra, encostrada, no nos da ninguna idea de la maravillosa actividad que hay en su interior.

En el sendero de la iniciación se van revelando nueve estratos diferentes y en el centro mismo de esta esfera rodante encontramos al Espíritu de la Tierra frente a frente. Es absolutamente cierto que “está gimiendo penosamente” en la Tierra para beneficio de todos, trabajando y esperando ansiosamente por la manifestación de los Hijos de Dios, de manera que, igual como el alma que busca y aspira a la liberación, es liberada de su cuerpo denso, así el Espíritu de la Tierra pueda también ser liberado de su cuerpo de muerte, en el que está actualmente confinado por nosotros.
Por supuesto, no hay que pensar que el Espíritu de la Tierra sea un hombre más grande o que tenga una forma física diferente de la de la Tierra misma. El cuerpo vital de Jesús, en el que se focalizó el Espíritu de Cristo ante de su ingreso en la Tierra, tiene la forma humana corriente; ha sido conservado y se le muestra al candidato al llegar a cierto punto de su progreso. Algún día, en el lejano futuro, volverá a servir de albergue al benevolente Espíritu de Cristo cuando retorne del Centro de la Tierra, en tiempos en que todos nos hayamos vueltos etéricos y en que El estará pronto para ascender a las Esferas Superiores, dejándonos para que seamos enseñados por el Padre, cuya religión será mucho mas elevada que la Cristiana.
El mito de Fausto nos presenta una situación curiosa en el encuentro del héroe, que es el alma que busca la verdad, con diferentes clases de espíritus. El espíritu de Fausto, inherentemente bueno, se siente atraído hacia los órdenes elevados; se siente a fin al benevolente Espíritu Terrestre, y se lamenta de su incapacidad para detenerlo y aprender de Él. Frente a frente con el Espíritu de la Negación, que solo desea enseñar y servir, se encuentra en cierto sentido dueño de la situación, porque el Espíritu no puede salir pasando sobre el símbolo de la Estrella de cinco puntas en la Posición en que ha sido colocada en el suelo. Pero tanto su incapacidad para detener al Espíritu de la Tierra y obtener enseñanza de ese exaltado Ser como su dominio sobre el Espíritu de la Negación, son debidos al hecho de que se ha puesto en contacto con ellos por casualidad y no merced al poder anímico internamente logrado.
Cuando Parsifal, el héroe de otro de esos grandes mitos anímicos, visita por primera vez el Castillo del Grial, se le pregunta cómo es que ha llegado allí, a lo cual contesta: “No lo se”.
Sencillamente ocurrió que entró en el lugar santo, de la misma manera en que un alma obtiene a veces vislumbres de los reinos celestiales en una visión. Pero no podía quedarse
en Montsalvat. Se vio obligado a salir otra vez al mundo y aprender sus lecciones.
Muchísimos años después volvió al Castillo del Grial, cansado y abatido por su búsqueda, y
entonces se le hizo la misma pregunta: “¿Cómo viniste aquí?” Pero esta vez la respuesta fue distinta: “Vine sufriendo y buscando”.
Este es el gran punto cardinal que señala la gran diferencia entre las personas que accidentalmente se ponen en contacto con los espíritus de los reinos suprafísicos o quienes, por pura casualidad, tropiezan con la solución de alguna ley de la Naturaleza, y aquellos que mediante una búsqueda diligente y particularmente por vivir la vida exigida, alcanzan la Iniciación consciente en los secretos de la Naturaleza. Los primeros no saben cómo emplear ese poder inteligentemente y se encuentran por lo tanto desvalidos. Los últimos son siempre dueños de las fuerzas que manejan, en tanto que los otros son simples muñecos para el que quiera aprovecharse de ellos.

del libro "Los Espíritus y las Fuerzas de la Naturaleza", de Max Heindel


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Dos Preguntas y sus Respuestas - en you tube -




CAPITULO VI
DOS PREGUNTAS Y SUS RESPUESTAS

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Un estudiante pregunta: “¿No es la Naturaleza la culpable de las deformaciones en el Reino Vegetal y Animal, lo mismo que en la raza humana? ¿Puede existir una inteligencia perfectamente equilibrada y sana juntamente con una voluntad poderosa en un cuerpo deforme?”
En primer lugar sería del caso preguntar qué es lo que se entiende aquí por Naturaleza.
Bacon dice que Dios y la Naturaleza se diferencian entre sí como el sello y su estampa. La Naturaleza es el símbolo visible de Dios, y en nuestra época tenemos una fuerte tendencia a pensar en la Naturaleza en forma muy materialista. Pero en toda manifestación de la Naturaleza existen fuerzas, no fuerzas ciegas, sino inteligentes, que son las que motivan la acción. Cuando hablamos de electricidad, de magnetismo, de expansión del vapor, etc., en realidad se trata de inteligencias invisibles para nosotros, que se ponen en operación cuando se establecen ciertas condiciones. Los Espíritus de la Naturaleza forman las plantas, los cristales de roca y juntamente con otras numerosas jerarquías están trabajando continuamente en torno de nosotros, aunque invisiblemente, sin embargo, están siempre ocupadísimos en hacer eso que llamamos Naturaleza..
Son seres evolucionantes, como nosotros, y por el hecho mismo de que estén evolucionando se ve que nos son perfectos y que, por lo tanto, pueden cometer errores que resulten en deformaciones o mal conformaciones, de manera que puede decirse que las inteligencias invisibles que hacen lo que nosotros llamamos la Naturaleza, son culpables de frecuentes errores, lo mismo que nosotros.
En cuanto a la otra pregunta respecto a si puede existir una inteligencia sana y equilibrada, así como una poderosa voluntad en un cuerpo deforme, podemos contestar que sí, indudablemente, pero como la expresión de esa inteligencia depende de la eficiencia de su instrumento, puede encontrarse obstaculizada por la deformidad física, en la misma forma en que un hábil obrero puede encontrarse obstaculizado en su eficiencia por el estado de sus herramientas.
La siguiente observación es muy digna de tenerse en cuenta: SE DICE EN LA OBRA Concepto Rosacruz del Cosmos que la facultad de percibir el espacio está relacionada con el delicadísimo ajuste de los tres canales semicirculares del oído, que señalan tres dimensiones del espacio, El pensamiento lógico y el talento matemático están siempre en relación con la precisión de su ajuste.
“Parece que la percepción de la cuarta dimensión ha sido obtenida por matemáticos de alto grado. ¿Podríais indicarnos si ha habido algún cambio en la disposición de esos canales semicirculares o cuál es el proceso que nos lleva a la conciencia de la cuarta dimensión?”

“Parecería que los Espíritus de la Naturaleza y los elementos tienen esta conciencia de la cuarta dimensión, la cual constituye un grado superior al que nosotros poseemos actualmente y quizá superior aun al que poseen las abejas o los caballos de Elberfeld.
¿Queréis proveernos del eslabón que falta? ¿Qué es lo que hace al hombre o a la humanidad superior a estos seres y cuál es la disposición de estos canales semicirculares en el caso de esos caballos excepcionales? ”
Para la mayoría de la humanidad las cifras constituyen algo absolutamente seco, no sólo carecen de interés, sino que son completamente aburridoras, porque estamos acostumbrados a vivir una vida objetiva entre otras personas y amigos, y damos expresión a nuestros deseos, sentimientos y emociones, y cuanto más intensos son, tanto más interesante encontramos la vida, mientras que, por el contrario, las cosas que no nos ofrecen ninguna emoción, las consideramos aburridas y sin interés. Por consiguiente, la mayoría no se ocupa de las matemáticas ni de nada que agudice la mente, sin despertar simultáneamente la naturaleza emocional.
Sabemos que Dios geometriza, y que todos los procesos de la Naturaleza están fundados en un cálculo sistemático efectuado en la Mente Maestra. Cuando Dios, como gran Arquitecto del Universo, ha construido todo el mundo de acuerdo con cálculos matemáticos, entonces sabemos que consciente o inconscientemente el matemático va dirigiéndose por un rumbo que eventualmente lo llevará a encontrarse frente a frente con Dios y esto en sí mismo supone una expansión de la conciencia. Si consideramos el hecho de que cada uno de los canales semicirculares es realmente un nivel suprasensitivo, ajustado para indicar a nuestra conciencia los movimientos de nuestro cuerpo LOS ESPÍRITUS Y LAS FUERZAS DE LA NATURALEZA en largo, ancho y alto, también comprenderemos que su ajuste de precisión es necesario para la percepción en el espacio . Si son exactos, entonces la percepción en el espacio de esa persona es perfecta, y si se entrega al estudio de las matemáticas y sus teorías concordarán con lo que ve en el mundo y sus hechos reales. En algunas mentalidades elevadas engendra cierto amor por las cifras y los números, de manera que pueden reposar en esa mentalidad que para los demás es fuente de cansancio y fatiga, y entonces el amor por las cifras puede despertar en él las facultades latentes, pero no debido a ningún cambio en los canales semicirculares, porque estas estructuras óseas no se cambian fácilmente en el curso de una vida. No queda duda alguna, sin embargo, de que todo aquel que tenga vocación por la música o las matemáticas formará más tarde, en el Segundo Cielo, esos canales con mayor precisión y ajuste, en el período que va desde la muerte a un nuevo nacimiento.
Con respecto a la conciencia de los elementos o Espíritus de la Naturaleza, es correcto presumir que tienen lo que podría llamarse una conciencia cuadridimensional, porque además de la altura, largo y anchura, existe lo que podríamos llamar compenetrabilidad de los éteres. Con la visión etérica se puede ver a través de una montaña y si tenemos un cuerpo etérico como el que tienen los Espíritus de la Naturaleza, entonces podemos caminar a través de las rocas más duras del granito. No presentarán esas rocas a nuestra marcha más obstáculo que el aire a nuestra marcha en la tierra. Y en realidad ni siquiera eso, porque aquí a veces nos obstaculiza el viento. Pero aun entre los Espíritus de la Naturaleza hay diferentes entidades y una correspondiente variación de la conciencia.
Los cuerpos de los gnomos están formados principalmente por éter químico, y de ahí que pertenezcan a la tierra y sean terrenos, esto es . uno nunca los ve volando como los silfos.
Pueden ser quemados en el fuego. También se van volviendo viejos, en una forma no muy distinta de los seres humanos.
Las ondinas, que viven en las aguas y los silfos del aire también están sujetos a la muerte, estando sus cuerpos formados por el éter vital y el éter luminoso respectivamente, lo que lo hace mucho más longevos, de manera que mientras los gnomos no viven más que unos cuantos centenares de años, las ondinas y los silfos pueden vivir millares de años, y las salamandras, cuyos cuerpos están formados principalmente por el cuarto éter, se dice que viven muchos millares de años. La conciencia que anima y forma estos cuerpos pertenece a un número de jerarquías divinas que están obteniendo mas y mas experiencia de esta manera, y las formas que están construidas de materia y están así animadas, han alcanzado cierto grado de conciencia de si mismas. Durante esas larguísimas existencias, tienen cierto sentido de su propia vida transitoria, y en rebeldía contra este estado de cosas se produce esa guerra de los elementos, notablemente entre el Fuego, el Aire y el Agua. Imaginándose que se los tiene en esclavitud, tratan de liberarse de sus grilletes por la fuerza, y como no tienen bastante sentido para guiarse por sí mismos, corren desordenadamente en forma destructiva, lo que a veces puede producir grandes catástrofes. La conciencia de los gnomos es demasiado lerda para que sean capaces de tomar la iniciativa, pero frecuentemente se hacen cómplices de los demás Espíritus de la Naturaleza, abriéndose pasajes en las rocas, lo que favorece luego las explosiones.
Sin embargo, todo esto nada tiene que ver con los caballos de Elberfeld u otros animales prodigios. Estos constituyen la vanguardia de sus respectivos Espíritus –colectivos o grupales, y probablemente es la última vez que se han encarnado en forma animal. Cuando se producen estos casos, esos espíritus son relegados al Caos, donde tendrán que esperar durante la Noche Cósmica, hasta que sus hermanos menos dotados lleguen al estado de desenvolvimiento necesario para comenzar su evolución humana en el Periodo de Júpiter.
del libro "Los Espíritus y las Fuerzas de la Naturaleza", de Max Heindel


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Constitución de la Tierra y Erupciones Volcánicas - en you tube -


CAPITULO VII 
LA CONSTITUCIÓN DE LA TIERRA Y LAS ERUPCIONES VOLCÁNICAS

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Aun entre los mismos ocultistas se considera como uno de los problemas mas difíciles el de investigar la misteriosa constitución de la Tierra. Todo ocultista sabe cuanto mas fácil es investigar completa y correctamente el Mundo del Deseo y la Región del Pensamiento Concreto, trayendo los resultados de esas investigaciones al Mundo Físico, que investigar completamente los secretos de nuestro planeta físico, porque para poder hacerlo así completamente uno tiene que haber pasado por los nueve Misterios Menores y la primera de las Grandes Iniciaciones. 
La ciencia moderna sabe muy poco acerca de este asunto. En lo que toca a los fenómenos sísmicos, cambian frecuentemente sus teorías, porque continuamente descubren nuevas razones que hacen sus teorías anteriores insostenibles. Han investigado, con sus maravillosas precisión y escrupulosidad, la costra exterior, pero solo hasta profundidades insignificantes. En cuanto a las erupciones volcánicas, tratan de entenderlas, como tratan de comprender todo lo demás en una forma puramente mecánica, describiendo el centro de la Tierra como un horno ardiente y llegando a la conclusión de que las erupciones son el resultado de filtraciones de agua accidentales o de otras causas similares. 
En cierto sentido, sus teorías tienen algún fundamento, pero en este caso, como siempre, se olvidan de las causas espirituales que el Ocultista considera las únicas verdaderas. Para el ocultista el mundo no está “muerto”. Al contrario, toda grieta y hendidura está compenetrada por el espíritu, que es la levadura que produce los cambios en el planeta. 
Las diferentes clases de cuarzos, los metales, la disposición de los diferentes estratos, todo tiene un significado muchísimo mayor que lo que el investigador materialista es capaz de imaginar. Para el ocultista, la forma en que están dispuestos esos materiales tiene un significado muy profundo. 
Ante la visión educada del Iniciado de los varios grados de los Misterios, la Tierra parece formada por estratos, algo así como una cebolla, estando cada capa recubriendo la anterior o mas interna. Existen nueve estratos y el corazón central, siendo así diez en total. Estos estratos se le van revelando al Iniciado gradualmente. Cada estrato se le hace accesible con cada iniciación, de manera que al final de las nueve iniciaciones menores, el es el señor y maestro de todos ellos, aunque todavía no tiene acceso a los secretos del corazón central. 
De acuerdo con el antiguo lenguaje estas nueve etapas se llamaban los “Misterios Menores”, los cuales llevaban a neófitos conscientemente a través de todo lo relativo a su pasada evolución, merced a las actividades de la existencia involuntaria, de manera que entonces puede comprender la manera y el significado de la obra que entonces realizó inconscientemente. Así se le muestra como la nónuple constitución actual ( el triple cuerpo,  la triple alma y el triple espíritu) fue traída a la existencia: como las grandes Jerarquías trabajaron el espíritu virginal, despertando en el Ego y ayudándolo a formar el cuerpo; y también el trabajo que el mismo ha realizado, extrayendo del triple cuerpo tanta triple alma como actualmente posee . Se lo lleva, una grada a la vez, por las nueve de los Misterios Menores, los nueve estratos. 
Cuando el hombre en su marcha ha pasado por las nueve iniciaciones menores, obteniendo así acceso a los nueve estratos, aún tiene que ganar el acceso al corazón central. Esta puerta le es abierta por la primera de las Cuatro Grandes Iniciaciones, en la que aprende el misterio de la mente, esa parte de su ser que comenzó en la Tierra. Cuando está pronto para la primera Gran Iniciación ha desarrollado su mente hasta el grado que todos los seres humanos alcanzaran hacia el final del Periodo Terrestre. En esa Iniciación se le da la clave de la próxima etapa, y todo el trabajo que haga el iniciado desde entonces será similar al que hará la humanidad en general en el Periodo de Júpiter, por lo que no nos concierne actualmente a nosotros. 
El diagrama que va en la página...1 nos dará una idea de la disposición de los estratos terrestre, omitiéndose el corazón central para indicar con más claridad la forma de lemniscata de las 1 Este diagrama ha sido reproducido de la obra de Max Heindel Concepto Rosacruz del Cosmos, figurando como “Diagrama 18”. Corrientes en el noveno estrato. En el diagrama aparecen los estratos como si fueran del mismo grosor, aunque en realidad algunos son mucho más delgados que los otros. Empezando con el más exterior, aparecen en el orden siguiente: 

1-La Tierra Mineral: Esta es la costra pétrea de la Tierra, de la que se ocupa la geología hasta donde logra penetrar. 

2.-El Estrato Fluídico: La sustancia de este estrato es más fluídica que la costra externa, pero no es como el agua, sino mas bien como una pasta espesa. Tiene la cualidad de la expansión, como la de un gas extremadamente explosivo, y se mantiene en su lugar gracias a la enorme presión de la costra externa. Si se sacara la costra externa, todo el Estrato Fluídico desaparecería en el espacio con una formidable explosión. Corresponde a las Regiones Química y Etérica del Mundo Físico.

3.-Estrato Vaporoso: En el primer y segundo estratos no existe realmente vida consciente, pero en este estrato hay una vida pulsante y fluyente, como en el Mundo de Deseos que rodea e ínter penetra nuestra Tierra. 

4.- Estrato Acuoso: En este estrato existen las posibilidades germinales de todo cuanto existe en la superficie de la Tierra. Aquí están las fuerzas arquetípicas que están tras lo Espíritus – grupo o colectivos, así como las fuerzas arquetípicas de los minerales, porque este es la expresión física directa de la Región del Pensamiento Concreto. 

5.-Estrato Germinal: Los científicos materialistas han fracasados en todos sus esfuerzos para descubrir el origen de la vida, estos es, como vinieron primeramente a la existencia las cosas vivientes surgiendo de la materia muerta. En realidad., de acuerdo con las explicaciones ocultas de la Evolución, la pregunta debería referirse a como se originaron las cosas “muertas”. La vida estaba allí antes que las formas muertas. Formó sus cuerpos con la tenue sustancia vaporosa, antes de que ella se condensara en la sólida costra terrestre. Solo cuando la vida había abandonado las formas, pudieron éstas cristalizarse y convertirse en cosas duras y muertas. El carbón mineral no es otra cosa que el cuerpo cristalizado de los cuerpos vegetales, lo mismo que el coral es la cristalización de las formas animales. La vida deja las formas y las formas mueren. La vida nunca vino a una forma a despertarla y animarla. Fue la vida la que se retiró de las formas y las formas murieron. Así es como aparecieron las cosas “muertas”. En este quinto estrato está la fuente primordial de la vida de donde surgió el ímpetu que construyó todas las formas de la Tierra. Corresponde a la Región del Pensamiento Abstracto. 

6.-Estrato Ígneo : Por extraño que parezca, este estrato posee sensación. El placer y el dolor, la simpatía y la antipatía tienen su efecto aquí en la Tierra. Se supone generalmente que la Tierra no puede tener sensaciones de ninguna especie, sean cuales fueren las circunstancias. 
El ocultista, sin embargo, mientras observa la siega de l grano maduro o la recolección de las frutas en el otoño, o el corte de las flores, conoce el placer que experimenta la Tierra misma con ello. Es un placer similar al que siente la vaca cuando el ternero chupa la leche de sus ubres repletas. La Tierra siente placer al haber proveído la nutrición necesaria para su progenie de formas, y este placer alcanza su máximo durante el tiempo de la cosecha. 
Por otro lado, cuando se arranca a las plantas de raíz, es evidente para el ocultista que la Tierra siente un pinchazo de dolor. Por esa razón no quiere comer alimentos vegetales que crezcan bajo la tierra. En primer lugar, están llenos de energía terrestre y son escasos de fuerzas solar, estando además emponzoñados por el hecho de haber sido arrancados de raíz. 
La única excepción a esta regla es la patata, que originalmente creció en la superficie de la tierra y que solo en tiempos comparativamente recientes empezó a desarrollarse bajo el suelo. Los ocultistas tratan siempre de nutrir sus cuerpos con frutos que crezcan al sol, porque contienen mayor cantidad de la superior energía solar y no han causado dolor alguno a la Tierra. 
Podría suponerse que la miseria sería algo muy penoso para la Tierra, pero ocurre justamente lo contrario. Cada desintegración de la costra dura le proporciona una sensación de alivio y cada solidificación y endurecimiento es una fuente de dolor. Cuando un torrente de la montaña arrastra el suelo consigo y lo lleva hacía las llanuras, la Tierra se siente mas libre; pero cuando el limo vuelve a depositarse otra vez como ocurre en los bancos en la boca de los grandes ríos, se produce una sensación de molestia. Como la sensación en los animales y el ser humano se debe a sus respectivos cuerpos vitales separados, así también las sensaciones de la Tierra son particularmente activas en este Sexto Estrato, que corresponde al Mundo del Espíritu de Vida. Para comprender el placer que siente la Tierra cuando los trabajos mineros desintegran las duras rocas, y el malestar cuando los depósitos se van juntando, debemos recordar que la Tierra es el cuerpo denso de un Gran Espíritu, el que, para suministrarnos un medio ambiente en el que podamos vivir y obtener experiencia, ha tenido que cristalizar su cuerpo hasta alcanzar su estado sólido actual. 

Conforme prosiga la Evolución y el hombre aprenda las lecciones correspondientes a este  punto máximo de concreción, entonces la Tierra se irá ablandando y su Espíritu se liberará  más y mas. Esto es lo que quería decir San Pablo cuando hablaba de que toda la creación  está gimiendo penosamente, esperando por el día de la liberación. 

7.- Estrato Reflector: Esta parte de la Tierra corresponde al Mundo del Espíritu Divino. 
Existen en la Ciencia Oculta lo que se denomina “Los Siete Secretos Indecibles”. Para los que no conozcan estos secretos o no tengan por lo menos una vislumbre de su importancia, las propiedades de este estrato deben parecerles peculiarmente absurdas y grotescas. En este estrato existen todas las fuerzas morales o más bien inmorales que conocemos como las “Leyes de la Naturaleza”. Al principio de la carrera consciente del hombre, estas fuerzas eran muchísimo peores que actualmente, pero parece que conforme la humanidad progresa éticamente, estas fuerzas mejoran correspondientemente, y cualquier relajamiento que se produzca en la moral tiene cierta tendencia a desencadenar estas Fuerzas de la Naturaleza, provocando caos terribles en la Tierra, mientras que el anhelo y la lucha ferviente por altos ideales convierte a esas fuerzas en menos enemigas del ser humano. 
Las fuerzas de este estrato son, en todo momento, un reflejo exacto del estado de la moral  existente en la humanidad. Desde el punto de vista oculto, la “Mano de Dios” que castigó a  Sodoma y Gomorra, no es una superstición estúpida, porque así como existe una responsabilidad individual para la Ley de Consecuencia que atrae a cada persona los justos resultados de sus obras, sean buenas o malas, así también existe una responsabilidad comunal y nacional, que atrae sobre los grupos correspondientes de seres humanos los resultados ineludibles de sus actos colectivos. Las fuerzas de la Naturaleza constituyen los agentes generales de esa justicia retributiva, causando inundaciones, terremotos o bien las provechosas formaciones de yacimientos petrolíferos o carboníferos para varios grupos, de acuerdo con sus merecimientos. 

8.-Estrato Atómico: Este es el nombre dado por los Rosacruces a la octava capa de la Tierra, que es la expresión del Mundo de los Espíritus Virginales. Parece tener la propiedad de multiplicar muchas veces las cosas que hay allí. Esto se aplica, sin embargo, solamente a las cosas que han sido definitivamente formadas. Un trozo informe de madera, o una piedra bruta, no tiene existencia allí, pero todo lo que ha sido esculpido o modelado o tiene vida y forma como una flor o un cuadro, este estrato lo multiplica hasta un grado asombroso. 

9.-Expresión Material del Espíritu Terrestre: Existen aquí corrientes lemniscatas (en forma de 8 ) que están íntimamente relacionadas con el cerebro, el corazón y los órganos sexuales de la raza humana. Corresponde al mundo de Dios. 

10.-Centro del Ser del Espíritu Terrestre: Nada más puede decirse acerca de éste, sino que es el estrato germinal ultérrimo de todo cuanto hay en la Tierra y corresponde al Absoluto.

del libro "Los Espíritus y las Fuerzas de la Naturaleza", de Max Heindel


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